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miércoles, 5 de abril de 2023

Educación Inclusiva segun UNESCO.

 

La inclusión se ve como el proceso de identificar y responder a la diversidad de las necesidades de todos los estudiantes a través de la mayor participación en el aprendizaje, las culturas y las comunidades, y reduciendo la exclusión en la educación.

Involucra cambios y modificaciones en contenidos, aproximaciones, estructuras y estrategias, con una visión común que incluye a todos los niño/as del rango de edad apropiado y la convicción de que es la responsabilidad del sistema regular, educar a todos los niño/as ¨ (inclusioneducativa.org, 2006).
Para lo cual la educación inclusiva va a ocuparse de aportar respuestas pertinentes a toda la gama de necesidades educativas en contextos pedagógicos escolares y extraescolares.
Hace referencia a metas comunes para disminuir y superar todo tipo de exclusión desde una perspectiva del derecho humano a una educación; tiene que ver con acceso, participación y aprendizaje exitoso en una educación de calidad para todos.

La educación inclusiva significa que todos los niño/as y jóvenes, con y sin discapacidad o dificultades, aprenden juntos en las diversas instituciones educativas regulares (preescolar, colegio/escuela, post secundaria y universidades) con un área de soportes apropiada.
 

martes, 4 de abril de 2023

Actualidad de la Educación Inclusiva.

Parte de la defensa de igualdad de oportunidades para todos los niños, busca remover todas las barreras para el aprendizaje, y facilitar la participación de todos los estudiantes vulnerables a la exclusión y la marginación.

¿Cómo debe ser una escuela inclusiva? (Ainscow, M.2001)

• Contar con líderes que estimulen la interacción-aceptación.

• Promover la participación integral de todos los agentes educativos.

• Organizar su trabajo técnico pedagógico en función de la atención a la diversidad y la participación de todos.

• Estimular climas favorables para el aprendizaje. 

• Promover el trabajo interdisciplinario para la solución a problemas educativos y potenciar alumnos, docentes y escuela.

• Propiciar la participación de la familia a partir de una estrategia educativa.

• Promover la participación de la comunidad y la integración de los alumnos.

¿A quiénes incluimos?

Nos incluimos todos en la medida que desarrollemos esa capacidad de aceptación de nosotros mismos y de los demás, lo que permite plantear que la inclusión es un fenómeno social derivado de la educación misma.

En el centro de la inclusión está la escuela, se relacionan con la misma. (Ainscow, M.2001)

Los alumnos.

La diversidad no solo se manifiesta en aquellos estudiantes con necesidades especiales, sino en todos, es por tanto su atención la que revela inclusión educativa como un sistema integral de vinculación de todas y todos los que se implican en el proceso educativo. (Castellanos y otros 2002 Pág. 78).

Los docentes.

Saber comprender y aceptar.

• Concebir, dirigir y regular adecuadamente el proceso de enseñanza aprendizaje.

• Poseer competencias para la dirección del proceso educativo en general y el proceso de enseñanza aprendizaje en particular: competencias didácticas.

• Saber distribuir tiempos y participación del alumnado.

• Saber ofrecer ayudas pedagógicas.

• Saber trabajar en grupo.

Los directivos.

La familia.

Los procesos de inclusión en la familia empiezan con la comprensión de que la inclusión es todo lo que tenga que ver con la interacción y la convivencia con todos y entre todos, la aceptación del otro tal cual es y algo muy preciso, aceptar cualquier miembro de la misma que presente alguna discapacidad para poder educarlo coherentemente y prepararlo para vivir en sociedad.

La comunidad.

Los medios de información.

La sociedad en su conjunto.

¿Cómo lograr la inclusión educativa?

Para lograr la inclusión educativa se requiere de transformaciones que están por encima de cualquier esfuerzo de una escuela aislada. Esto es en primer lugar un problema social que se liga directamente a las políticas educacionales de cada país.

La innovación pedagógico-didáctica es un tipo de innovación educativa, que constituye un proceso de enriquecimiento basado en el empleo de procedimientos, alternativas, por parte del docente que fortalecen lo establecido en el currículo e impacta la formación del alumnado y del resto de los agentes educativos (González 2011 pag.74)

Este docente para innovar en función de la inclusión necesita:

• Implicarse en la realidad social que le sirve de contexto, desde el punto de vista económico, social, científico y las regularidades de los esfuerzos por lograr un desarrollo sostenible a nivel global.

• No le pueden ser ajenos los problemas fundamentales de la educación, entre los que se pueden mencionar: diversidad de tendencias pedagógicas, deficiencias en la dirección del proceso de enseñanza aprendizaje, acciones de auto superación, la masividad en la educación, entre otros.

• La diversidad educativa con la que trabaja: el diagnóstico pedagógico integral.

• El lenguaje instrumental de la Pedagogía: la Didáctica.

• Conocerse a sí mismo.

• Dinámica de la investigación educativa.

Las tareas docentes que se derivan de los propósitos de cada lección deben estar en correspondencia con la individualidad, lo que quiere decir no la elaboración de una tarea para cada alumno, sino el respeto al cómo cada alumno responde de acuerdo a sus características a las mismas. 



sábado, 1 de abril de 2023

LA EVALUACIÓN DE LA ENSEÑANZA.

 

La evaluación inclusiva es el recurso que tienen las escuelas para alcanzar mayores cotas de calidad, la atención a la diversidad es un factor asociado a una educación de calidad y, por tanto, requiere que se considere dentro de los criterios o indicadores de calidad.

Existen diversos índices que constituyen un avance significativo hacía la creación de una cultura escolar inclusiva a la vez que avanzan en propuestas concretas de indicadores que reflejan este concepto de evaluación inclusiva.

En este sentido el Índice de Ainscow (2001) es un conjunto de materiales diseñados para apoyar a las escuelas en el proceso de avanzar hacia una educación inclusiva. Se desarrolla en base a un proceso de autoevaluación de las escuelas en relación a tres dimensiones: Crear culturas inclusivas, elaborar políticas inclusivas y desarrollar prácticas inclusivas. El primero hace referencia a construir una comunidad en torno al desarrollo de valores inclusivos.

 Una cultura escolar inclusiva se define en relación a:

a. Cómo se posiciona el centro educativo con respecto a las diferencias

individuales. Para ello es necesario el desarrollo de un currículo amplio, relevante y diferenciado.

b. Sus planteamientos en relación a la calidad educativa. Ello supone la implantación de procesos de mejora continua.

c. La creación de un clima emocional positivo

d. El desarrollo de procesos de enseñanza-aprendizaje interactivos basados en la experimentación reflexiva.

e. Su implicación en el desarrollo de mejoras sociales.

Elaborar políticas inclusivas se dirige a dos pilares fundamentales: desarrollar una escuela para todos y organizar el apoyo para atender a la diversidad.

Otra propuesta es la realizada por Arnaiz (2003) en España, en un trabajo de investigación cuyo objetivo fundamental es evaluar el impacto y las respuestas educativas ante la diversidad en la Educación Secundaria Obligatoria, establece cuatro grupos de indicadores:

·    De contexto escolar: previsión y adecuada organización de acciones educativas para la atención a la diversidad.

·   De recursos: recursos materiales e instalaciones de aula y centro como a los recursos personales.

·    De procesos educativos: qué características debería tener la práctica educativa para atender a la diversidad.

·    De resultados: impacto que las medidas de atención a la diversidad tienen en las capacidades, habilidades y destrezas de los alumnos.

La evaluación inclusiva, conceptualizada como “evaluación tolerante” dentro del indicador de procesos educativos se define en relación a tres subindicadores: obtención de información a través de fuentes diversas, aplicación efectiva de la evaluación continua y utilización de técnicas de autoevaluación y coevaluación.

 

 

EVALUACIÓN Y ORGANIZACIÓN: DOS CAMBIOS IMPRESCINDIBLES PARA LA EDUCACIÓN INCLUSIVA.

Cualquier práctica de carácter inclusivo que no vaya acompañado por un sistema de evaluación que respete y valore las diferencias individuales solo conseguirá profundizar la brecha de la desigualdad.

En este sentido, es prioritario y de máximo interés establecer un modelo de evaluación coherente con los principios de inclusión: participación y aprendizaje de todos. Una evaluación cuya finalidad no puede ser la de clasificar o comparar a los alumnos sino identificar el tipo de ayudas y recursos que precisan para facilitar su proceso educativo (C. Duk y R. Blanco 2012).

EVALUAR PARA MEJORAR Y ATENDER A LA DIVERSIDAD: CONCEPTOS FUNDAMENTALES.

Promocionar una escuela inclusiva supone la superación de un modelo educativo instructivo y de transmisión para pasar a un modelo de promoción y desarrollo, de educación “en y para la diversidad”; exige un nuevo planteamiento de escuela dirigida a la calidad, no discriminatoria, participativa, que asuma la heterogeneidad como factor de enriquecimiento.

En consecuencia, una escuela inclusiva es una escuela de calidad. (Ainscow, 2001, Arnaiz, 2003)

EVALUAR PARA MEJORAR Y ATENDER A LA DIVERSIDAD: CONCEPTOS FUNDAMENTALES.

La evaluación inclusiva es vista como un enfoque de la evaluación en los centros educativos comunes en donde la política y la práctica están diseñadas para promover el aprendizaje del alumnado tanto como sea posible.

De esta forma, se insiste en que la finalidad de la educación inclusiva debe ser la participación y la promoción del aprendizaje de todos los estudiantes.

Elementos clave:

·*Ser accesible para todos los alumnos y continua.

*Todos los procedimientos de la evaluación deben de estar ligados al currículo escolar e informar sobre el aprendizaje.

*Evaluación como instrumento eficaz para el seguimiento de los progresos y para la planificación.

*Formación adecuada para profesores y especialistas.

*Evitar que el propósito “formativo” de la evaluación se distorsione o se pierda.

*Comunicar a los alumnos y familias, los objetivos de evaluación.

*Evitar los procedimientos de evaluación burocráticos.

*Colaboración entre los profesores, planificando y compartiendo experiencias de la práctica inclusiva.

*Implicación del alumno, de los padres y compañeros en actividades de evaluación continua, planificadas, apoyadas por el equipo docente y profesor.

*Identificación inicial de las necesidades educativas en el contexto del aula.

*Dedicación para actividades relacionadas con la evaluación.





 

Juego Didáctico: Inclusión Educativa.